Siempre he intentado mejorar la calidad de los cabellos míos y de los que caían en mis manos. Siempre soñando comenzar con hennas y barros de color.
Cuando aun apenas se hacía me gustaba masajear la cabeza relajando a la clienta y creando un momento agradable para ella.
Productos
Los productos en peluquería hace muchos años eran efectivos a la hora de teñir o rizar el pelo pero dañaban mucho y a veces hacían daños irreversibles a la clienta.
Esto formaba parte de el trabajo diario y a veces muchos cabellos no soportaban la carga química y todo el maltrato a que los sometía.
Las personas acudían al centro casi rezando para que lo que se querían hacer no les causase daños.
Después de un tiempo los producto avanzaron y se crearon líneas nuevas de cuidado capilar que mejoraron mucho el trabajo y la calidad de los cabellos.
La calidad de lo natural.
He intentado como he podido advertir de los daños de algunos productos y llevo muchos años trabajando con las tierras de color y las hennas naturales.
He visto la buena evolución de cabellos dañados a base de coloraciones naturales y tratamientos vegetales que nos recordaban que al final todo lo que tiene una base no química es beneficioso a la larga para conseguir una melena sana.
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